Hay una familia de virus llamados los virus del herpes. Dos de estos virus pueden causar infecciones en el ojo, que se llama enfermedad herpética ocular. Estos dos virus no son el mismo virus que causa el herpes genital, y la enfermedad herpética ocular no es una enfermedad de transmisión sexual.
Al sentir un dolor punzante, inflamación, dolor y secreción en alguno de los ojos, podemos creer erróneamente que se trata de conjuntivitis, sin embargo, puede que no sea esto lo que padecemos, pues los síntomas del «Herpes Ocular» generalmente se confunden con la conjuntivitis.
El Herpes ocular es una afección tanto de la piel de los párpados, córnea, conjuntiva o incluso la retina por el virus del Herpes simplex tipo 1 (el que provoca los famosos «fuegos o postemas «en la boca), informó el Dr. Franklin Rechnitzer, médico cirujano oftalmólogo.
“Es un virus y se comporta como cualquier otro, es decir, se contagia de una persona a otra la mayor parte de las veces el contagio puede pasar desapercibido y presentarse como una simple gripe”, agregó el Dr. Rechnitzer.
Síntomas
La infección primaria ocurre habitualmente antes de los 5 años, y más del 80% de los adultos ha estado en contacto con el virus, aunque la mayor parte de las infecciones primarias son asintomáticas y no traen consecuencias importantes.
Generalmente solo se afecta un solo ojo pero algunas personas pueden presentar afección de los dos ojos. Depende, de su localización si es en piel se puede presentar como vejigas llenas de pus muy dolorosas, si es en conjuntiva se presenta con dolor, inflamación, «ojo rojo» y secreción, si es en la córnea en un inicio presenta un dolor tipo punzante que rápidamente desaparece ya que el virus produce anestesia en la córnea, lo que complica más la situación.
Depende de la profundidad con que afecte la córnea puede presentar disminución de la visión tanto temporal como permanente, de ahí la importancia de que sea diagnosticado y tratado a tiempo por un oftalmólogo.
Asimismo al atacar el ojo por dentro puede producir inflamación que se presenta como sensibilidad a la luz y también pérdida de la visión, dependiendo del área retinal afectada puede ser parcial o total, inclusive causar ceguera.
Tratamientos
Los tratamientos tradicionalmente utilizados contra esta afección son los antivirales: aciclovir y trifluorotimidina. Si bien en los últimos años hubo grandes avances en el tratamiento del herpes ocular, aún existen problemas relacionados con la toxicidad de los fármacos, muchas veces poco tolerados por los pacientes y responsables de lesiones epiteliales. Generalmente, estas drogas se administran en forma de colirio o pomada.
Como todos los virus que existen, una vez que nos contagiamos del herpes ocular, el mismo vive con nosotros durante toda la vida, detalló el médico.