La opacidad del cristalino es comúnmente llamada catarata. Esta enfermedad impide que la luz entre directamente a la retina y que se formen las imágenes correctamente.
La catarata surge en una estructura natural que tenemos dentro del ojo llamada cristalino, que es un lente natural totalmente transparente que ayuda a enfocar las imágenes hacia la retina.
Los síntomas de una persona con cataratas son: una visión cada vez más pañosa (una especie de neblina) y que todo se pone más opaco, como si faltara luz. Este problema se puede presentar en personas de cualquier edad, sin embargo, es después de los 60 años que generalmente comienza a dificultar la visión.
¿Cuál es el tratamiento a seguir? La catarata se trata solamente con operación y para esto existen varias técnicas, pero al final todas se resumen en extraer este lente y colocar uno artificial. Lo positivo de esta cirugía es que no necesita anestesia general ni hospitalización. La cirugía cuenta con alto nivel de seguridad y bajos índices de complicaciones. El tiempo de recuperación varía de acuerdo al tipo de técnica y cirugía que se practica y variando de tres días a tres semanas.
Existen distintos tipos de catarata:
- Congénita
- Traumática
- Metabólica
- La medicamentosa
- La normal por la edad
Existen diversos mitos, por tanto es importante aclara que es falso:
- Que la catarata duele
- Que hay que dejarla madurar
- Que no se requiere cirugía
- Que existen tratamientos de gotas y vitaminas que eviten la formación de una catarata.
La catarata tiende a confundirse con otras enfermedades como manchas o nubes que puedan aparecer en los ojos, como el pterigión, una telita que crece frente al ojo, no adentro de él, como el caso e la catarata.
Por todo esto recomendamos incrementar los cuidados de la vista con una visita al oftalmólogo para detectar la presencia y la gravedad de una catarata, además de cualquier otro padecimiento que pudiera estar ocasionando una visión borrosa o alguna otra molestia.