Aunque se pensaban que los efectos eran reversibles, un equipo científico descubrió que parte importante de quienes formaron parte de una misión en la Estación Espacial Internacional (EEI) tuvieron problemas en la visión al regresar.
La estadía en la estación y las caminatas espaciales tendrían consecuencias negativas para los ojos, ya que un número relevante de astronautas fueron diagnosticados con miopía, es decir, dificultades para ver de lejos, luego de volver de sus misiones.
En este sentido, expertos de la NASA dieron cuenta que las estadías en el espacio generan cambios en la estructura del ojo, que derivarían en este error de refracción.
¿Cómo cambian los ojos al viajar al espacio?
En 2005, el astronauta John Phillips viajó a la Estación Espacial Internacional y ya en su estadía comenzó a notar problemas en la visión al enfocar objetos alejados.
Al retornar a la tierra, se le diagnosticó miopía y, después de algunos exámenes, los médicos que estudian este fenómeno detectaron cambios en los ojos, los mismos que experimentaron otras personas que hicieron viajes espaciales.
Aunque los expertos de la NASA desconocen la relación causal de esta situación, se estima que la presión dentro del cráneo de los astronautas hace que la zona posterior de los ojos adquiera una forma más plana, empujando la retina hacia afuera.
Los ojos también mostraban mini estrías por este cambio tan ágil, y los nervios ópticos también sufrieron daños. El 80% de quienes viajaron al espacio vuelven con problemas en la vista, es decir, con algún grado de miopía.
La miopía puede ser corregida a través de la cirugía Lasik, lo que hará prescindir de los lentes ópticos y lentes de contacto.
Fuente: comunicae.com.mx