Las horas laborales que en buenos casos exceden las ocho reglamentarias, más las de estudio o de ocio, que cada persona pasa al frente del computador generan un impacto en la salud visual.
Diversos estudios han demostrado las alteraciones que pueden generar el uso excesivo de computadores y equipos similares en la salud visual:
“La exposición constante a las pantallas de computador y televisión pueden causar algunas alteraciones visuales relacionadas con la luz que estas pantallas emiten y con la cercanía de los ojos a éstas, con síntomas primarios como: visión borrosa, ojos cansados o dolor de cabeza”, explica Edgar Leguizamón, docente de la facultad de Ciencias de La Salud de la Universidad de La Salle.
Síndrome del usuario del computador
Existen otras alteraciones comunes relacionadas con el «Síndrome del usuario del computador«, las cuales son fáciles de identificar como: ardor en los ojos, ojos rojos, sensación de ojo seco, saltarse renglones al leer, dificultades para enfocar al cambiar de distancia.
Las causas de este síndrome son la combinación de problemas visuales generados por defectos de visión como miopía o astigmatismo no corregidos, malos hábitos o deficiente ergonomía visual.xa0“Algunas veces éstas alteraciones se presentan a nivel de los músculos de los ojos y por ende se requiere adoptar buenos hábitos visuales, además de terapia o entrenamiento visual”, agrega Leguizamón.
“En la mayoría de los casos los síntomas aparecen porque la demanda visual de la tarea que realizamos a diario excede las habilidades visuales del individuo para poder realizarla confortablemente; es decir, que la persona pasa leyendo o escribiendo más horas de las que sus ojos pueden pasar frente al computador sin sentir molestias”, asegura el optómetra.
Vacaciones para los ojos
En época de vacaciones trate de disminuir la cantidad de horas que permanece al frente de las pantallas. Para lograrlo, antes de conectarse establezca previamente cuántas horas va a estar conectado.
En jornadas de más de seis horas frente a las pantallas, realice descansos periódicos de 1 minuto, cada 20 minutos. Durante ese tiempo ejercite los ojos haciendo cambios de enfoque. Un buen ejercicio para esto puede ser contar la mayor cantidad de elementos que se encuentren y que se ubiquen lejos.
En un cuarto cerrado, o apenas iluminado, mueva los ojos sin mover la cabeza, mirando repetidamente, con movimientos lentos hacia la izquierda y la derecha, luego hacia arriba y abajo. Finalmente, realice movimientos circulares; primero trazando un arco por arriba, de izquierda a derecha ida y vuelta, luego un arco por debajo, y luego redondeles completos.
Si es necesario, consulte sobre el uso de lentes de descanso y/o de gotas lubricantes para mejorar el síntoma de ardor y ojo seco.
Considere una revisión con un oftalmólogo, quien al encontrar cualquier tipo de alteración genera un plan de terapia y entrenamiento acorde con las necesidades y edad del paciente, logrando mejoría de una manera rápida y eficaz en el 95% de los casos.