El gateo es el desplazamiento más básico de las guaguas y una de sus principales virtudes es que previene la aparición del “ojo desviado” u “ojo vago”.
Este desequilibrio en la función de un ojo respecto a otro, suele tener frecuentemente, como tratamiento un parche durante unos periodos diarios determinados (unas 6 horas al día).
Por su parte, el gateo infantil minimiza su aparición, ya que genera un tipo de actividad simétrica que facilita la utilización de la vista bilateral para identificar el suelo y sus características (al evitar obstáculos o peligros) y el posicionamiento de objetos o juguetes.
Fuente: Bebes y más