El astigmatismo causa visión borrosa debido a la curvatura irregular que adopta el ojo. Aunque puede ser congénito y corregirse de manera natural después de los 18 años, en algunos pacientes puede no ser así, convirtiéndose en un factor de riesgo para sufrir de queratocono.
Para los cirujanos oculares cualquier cambio igual o superior a 0,5 dioptrías que surja en la adolescencia o en el caso que los defectos refractivos sean mayores en un ojo, son circunstancias para tener en cuenta porque pueden ser los primeros síntomas del queratocono.
Por lo tanto, sí se presentan cualquier indicio de visión borrosa es necesario acudir a un centro de cirugía ocular para realizarse exámenes y establecer qué defecto está afectando la visión. En el caso que el paciente esté cerca de la mayoría de edad puede ser sometido a una cirugía láser.
Fuente: Bogotá Laser