¿Se imagina un lente de contacto capaz de proyectar imágenes y datos sobre las imágenes que usted ve? Parece ciencia ficción, pero según una publicación del ‘Journal Of Micromechanics and Microengineering’, esto ya es posible. Investigadores construyeron el circuito a partir de una lámina de metal de sólo unos nanómetros de espesor y sobre ella construyeron los diodos emisores de luz de un tercio de milímetro de anchura. Para ello «espolvorearon» los componentes electrónicos sobre una lámina de material plástico.
Además, el prototipo contiene un circuito electrónico, así como una «pantalla» LED sencilla. Sin embargo, los científicos señalan que el prototipo no efectúa ninguna corrección en la miopía, hipermetropía o astigmatismo, pero han indicado que «no hay ningún obstáculo para que una lentilla que lo haga incorpore este sistema electrónico» ya que «la electrónica no impide ver a través de la lente con normalidad».
Pruebas en humanos
Este proyecto aún no se ha probado en humanos. Por el momento el único que ha podido utilizar esta tecnología ha sido un conejo, al que se le puso la lentilla durante 20 minutos «sin que el animal mostrara efectos negativos», según explica el texto.
Los expertos han apuntado a que un dispositivo «completo y funcional tardará en llegar» pero esperan obtener una versión sencilla con una pantalla de unos pocos píxeles «pronto».
Entre los posibles usos para esta pantalla virtual estarían su utilización durante la conducción, ya que se podrían leer ciertos datos directamente en el parabrisas o para usuarios de juegos de ordenador en los cuales los jugadores estarían inmersos por completo en un mundo virtual. Los investigadores también ha indicado que podría servir para navegar por Internet y ver contenidos «en el aire», siendo el usuario el único que los pudiese ver, «entre otras aplicaciones».
Parviz ha señalado que, de momento, la meta de este grupo de investigadores es demostrar que esta tecnología es técnicamente posible y asegurarse que funciona de una manera segura y satisfactoria. Además, no descartan su mejora en los próximos años, pues esperan que en un futuro se pueda «desarrollar una comunicación sin cables entre uno de estos dispositivos y alimentar el sistema con una combinación de células fotovoltaicas y radiofrecuencia».