Muchas veces, y sin razón aparente, el párpado comienza a temblar. Suele darse en uno solo y hay períodos en que se da con más frecuencia que otros, pero no provoca daño. Sus causas están relacionadas con las fibras musculares.
A la mayoría de las personas les ha ocurrido que el párpado les tiembla súbitamente. Esta situación, que si bien puede resultar bastante incómoda, no demora mucho en desaparecer.
Rubén Pascual, oftalmólogo del Hospital San Pedro, en Logroño, España, señala que este problema consisten en contracciones involuntarias de ciertas fibras musculares del orbicular del párpado, músculo responsable de parpadear y cerrar el ojo. Asimismo, agrega que no es un estado que genere daños en el ojo.
Cada una de estas contracciones tiene una duración de décimas de segundo, repitiéndose de manera rápida con una frecuencia de 1 a 4 por segundo. Pascual sostiene que este problema se llaman fasciculaciones, que consisten en temblores no coordinados y simultáneos, por lo que el párpado no se cierra.
Frecuencia e intensidad
Aunque hay personas que nunca han presentado un episodio de estos temblores, otros lo perciben solamente una vez al año o una vez a la semana. También existen temporadas donde un paciente sufre estas molestias por varios días, para no tener ningún síntoma durante extensos periodos posteriores.
La intensidad de las fasciculaciones también es variable. Ciertas personas padecen de una suave palpitación o temblor casi imperceptible para el resto. Sin embargo, otros tienen temblores tan fuertes, que los demás pueden advertirlo.
Existen casos en que la visión se distorsiona. El oftalmólogo explica que cuando ocurre esto, se ve como si “se saltara imagen” o “grabar un video mientra se corre”.
Causas
Los expertos aún no determinan las causas concretas de las fasciculaciones del párpado, aunque se piensa que es un desorden específico de regulación del sistema nervioso.
De esta forma, los estimulantes como el café o ciertas drogas y el estrés contribuyen a su aparición. Cuando surge con más frecuencia de lo común, como por ejemplo todos los días, usualmente está asociado a una época de mayor nerviosismo, ansiedad, angustia o depresión. No obstante, al tratar estos inconvenientes de salud con un profesional, los temblores del párpado tienden a desaparecer.