Una duda frecuente en los adultos mayores con problemas de visión es si pueden someterse a cirugía Lasik para corregirlos. Los especialistas comparten que, cumpliendo con los requisitos, las personas de edad avanzada sí son candidatos a Lasik y obtienen buenos resultados. La recomendación es seguir una serie de medidas preventivas en el post operatorio.
Los oftalmólogos señalan que las personas pueden ser candidatas para cirugía Lasik en cualquier etapa de la vida. Los problemas visuales que pueden ser corregidos a través de este procedimiento son miopía, astigmatismo, hipermetropía y presbicia. El prodedimiento es seguro y efectivo, demostrando tener muy pocas complicaciones.
Chequeo pre quirúrgico
Antes de someterse a la cirugía Lasik, es necesario realizarse exámenes visuales detallados para saber si el paciente es candidato a la operación. Quienes tienen córneas delgadas, dilatación de las pupilas y condiciones parecidas, no son aptos para pasar por esta intervención.
Esto se debe a que existiría una propensión al debilitamiento de la córnea o podrían existir mayores probabilidades de una mala visión nocturna, entre otros inconvenientes.
Cuidados en adultos mayores
En los adultos mayores se deben tomar ciertas medidas de prevención. Una condición habitual en este grupo etario es la sequedad visual. Por ende, después de la cirugía Lasik, se les aconseja tener cuidados especiales en cuanto a la hidratación del ojo, a través de gotas oculares. Estas siempre deben ser recetadas por un especialista.
La rutina de utilizar gotas luego de la cirugía refractiva es un proceso bastante simple, pero efectivo en la prevención de complicaciones posteriores.
Esta hidratación de los ojos en el post operatorio es de suma importancia no solamente en los adultos mayores , sino que para todas las personas que se someten a la operación. La frecuencia de la aplicación de las gotas también ser realizará según las indicaciones médicas.
No existe la necesidad de que los adultos mayores vivan con estos problemas visuales. Por ende, al sufrir de una vista distorsionada, borrosa, dificultades para observar elementos lejanos o cercanos, pérdida de la visión periférica o cualquier otra anomalía de esta índole, es importante visitar a un oftalmólogo para determinar las causas y llevar a cabo el procedimiento adecuado.