La agnosia es la incapacidad para reconocer estímulos previamente aprendidos o la falta de capacidad para aprender nuevos estímulos sin tener ninguna deficiencia en la percepción, el lenguaje o el intelecto. En palabras simples, es ver, sin poder reconocer lo que está frente a nuestros ojos… ni siquiera el propio rostro.
La agnosia produce una pérdida en la capacidad de reconocer sonidos (agnosia auditiva), objetos o personas (agnosia visual), sabores (agnosia gustativa) u olores (agnosia olfativa).
El trastorno se produce cuando un paciente con algún tipo de lesión cerebral responde a los estímulos ambientales comunes como si nunca los hubiera percibido antes aunque las fibras nerviosas sensoriales funcionen correctamente.
La agnosia es el resultado de una lesión en el cerebro. Esta lesión puede deberse a un traumatismo craneoencefálico, accidente cerebrovascular (ictus), demencia u otros desórdenes neurológicos.
No existe tratamiento para curar la agnosia. Pero se pueden mejorar los síntomas de la agnosia mediante rehabilitación a nivel cognitivo.
Tipos de agnosia
- Agnosia auditiva.xa0Produce trastornos en el oído. Esta agnosia da lugar a una mala comprensión de las percepciones sensoriales elementales, incluso aunque se puedan oír de forma normal.
- Agnosia digital.xa0Dificultad o incapacidad del enfermo para distinguir los dedos de su mano o los de la mano del que está efectuando su reconocimiento.
- Agnosia espacial.xa0Incapacidad para localizar un objeto en el espacio. Esto produce desorientación en las personas que la padecen.
- Agnosia de extensidad.xa0Se produce una incapacidad a la hora de reconocer las formas de los objetos.
- Agnosia táctil.xa0Las personas que sufren de este tipo de agnosia tienen la imposibilidad de reconocer los objetos cuando los tocan.
- Agnosia visual u óptica.xa0Pérdida de las imágenes visuales o de las imágenes depositadas en la memoria.