Un aspecto vital a la hora de escoger lentes de sol es fijarse en que las gafas no impidan la percepción del color ni causen distorsión de formas, además los lentes deben tener una etiqueta indicativa de protección de rayos dañinos y así proporcionar plena defensa óptica mediante el bloqueo de los rayos solares UVA y UVB.
Esto porque los rayos UVA (de longitud de onda larga) son los responsables de la pigmentación inmediata de la piel, del bronceado de retardo y penetran lentamente en las capas más profundas de la piel. Mientras que la radiación UVB (de longitud de onda media) posee mayor energía pero penetra poco en la piel y tiene efectos acumulativos -a largo plazo- responsables de las quemaduras, del incremento del grosor de la dermis y del cáncer de piel.
Respecto a la gran gama de modelos de lentes de sol que ofrece el mercado, lo importante, independiente del costo del producto, es que las gafas tengan protección solar y considerar que el color del cristal no tiene relación si filtra más o menos los rayos dañinos del sol.
El Lente Incorrecto
Si usamos un lente de mala calidad (sin filtro UV) causamos peor daño que si no usáramos un lente de sol. Es decir, entre usar un lente de mala calidad y no usar, a veces es mejor no usar.
Los 8 detalles a la hora de escoger lentes de sol:
- xa0Deben contar con una etiqueta que indique la protección UV.
- Preferir lentes con la mayor protección lateral posible.
- Los lentes no sirven para broncearse con rayos UVA ni para observar eclipses solares.
- Usar estuches a prueba de caídas.
- Marca, precio, forma y estilo deben ser acordes a quién escoge.
- El color del cristal del lente no es indicador de calidad, no tiene relación con la capacidad de filtración de rayos UV.
- Si el lente genera una distorsión en la percepción visual, no sirve.
- Los lentes deben absorber en un 99% a 100% los rayos UVA y UVB, mientras que los cristales deben detener el 75% al 90% de la luz visible.
Fuente: Chile.com