Un equipo de neurocientíficos del Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT), en Estados Unidos, ha estudiado por varias décadas el mecanismo de las ilusiones ópticas. Este análisis concluyó que mediante estas se pueden detectar inconvenientes de visión, y un video publicado de forma reciente exhibe los distintos modos de percibir una misma imagen. La Asapscience, autora de esta producción, revela el mecanismo de estos “trucos”; que operan de forma diferente si nos acercamos a la pantalla y luego nos alejamos a alguna distancia.
En la imagen, cuando una persona cuenta con una capacidad de visión normal, lo común es que vea el rostro de Albert Einstein. No obstante, al alejarse unos pasos de la pantalla, se ven las formas de la cara de Marilyn Monroe. De esta manera, dependiendo de la capacidad que se tenga para enfocar o distinguir los diversos contrastes de la imagen, el ojo seleccionará solamente algunos detalles.
En contaste, un individuo que necesite usar lentes no será capaz de apreciar estosxa0detalles. Por este motivo, no distinguirá al científico. La publicación indica que “si únicamente ves las características generales, como la forma de la boca, la nariz o el pelo, lo que podrás ver es a Marilyn Monroe», afirma la publicación.
El lapso de exposición de nuestro ojo a la imagen también causa que veamos un elemento u otro. Un estudio anterior a este donde se utilizaban fotografías con diversos rostros, demostraba que en un periodo corto, se observaba a un hombre enfadado, mientras que después de un rato se apreciaba a una mujer con rostro tranquilo.
El equipo del MIT, encabezado por el doctor Aude Oliva, durante más de una década ha generado ilusiones ópticas para demostrar cómo las imágenes pueden esconderse debido a distintas texturas, palabras y otra clase de objetos. Así, mezclando las imágenes de ambos personajes, se consigue una única fotografía, que varía nuestra percepción si se ve a diferentes distancias.
Oliva afirma que este tipo de “trucos” oculares no son utilizados solamente para detectar posibles problemas en la vista, sino que también para estudiar cómo el cerebro humano procesa la información visual que recibe.
Por otra parte, como han señalado los autores del análisis, estas ilusiones ópticas podrían ser usadas para enmascarar textos, de forma que solo algunas personas puedan leerlos.