Como ya lo habrás notado, ya comenzó la época que mezcla bajas temperaturas y niveles de contaminación elevados, lo que aumenta la cantidad de partículas o agentes irritantes en el ambiente. Además de las enfermedades respiratorias, la polución y el frío también pueden afectar a tus ojos, causando a una alta incidencia de conjuntivitis.
La conjuntivitis significa inflamación de la conjuntiva. La conjuntiva es la capa más externa del ojo, que recubre la zona visible del globo ocular y la parte interior de los párpados. Existen cuatro tipos de conjuntivitis, la infecciosa (causada por bacterias o virus), alérgica (causada por una reacción alérgica), irritativa (causada por un cuerpo extraño en el ojo) o química (causada por una sustancia química).
Cuidado con los niños
Esta es una de las infecciones oculares más frecuente en los niños. Los niños por lo general se quejan de molestias en los ojos, que no se alivian al frotárselos, incluso puede dolerle un poco. Posteriormente se produce enrojecimiento del ojo. Ellos sienten como si tuvieran algo en el ojo. Además presentan secreción (legañas) blanca, amarilla o verdosa.
Como el ojo se comunica con la nariz por el conducto lagrimal y la nariz con el oído, es probable que tu hijo, especialmente si es pequeño, presente algún cuadro de otitis al mismo tiempo que conjuntivitis. Es por eso que, si tu hijo además se queja dolor de oídos o llora demasiado debes acudir de inmediato a su médico.
La conjuntivitis pueden duran entre 7 a 14 días.
Los síntomas más comunes son:
- Enrojecimiento de los ojos
- Ardor
- Sensación de tener una arenilla
- Lagrimeo
- Secreción
¿Cómo se previene?
Los niños no se deben llevar las manos sucias a los ojos. Evitar el contacto directo con el ojo infectado. Además lavarse las manos después de la limpieza que se le realice al ojo.