No se puede sentir, tampoco se puede ver, hasta que ya es demasiado tarde. La retinopatía diabética, es la forma más común en la que se manifiesta la diabetes en el ojo y la principal causa de ceguera en adultos de 20-74 años. Esta se produce cuando la diabetes daña los vasos sanguíneos de la retina.
La retinopatía diabética afecta a 7.7 millones de estadounidenses, y se prevé que ese número aumente a más de 11 millones de personas en 2030.
“Sólo la mitad de todas las personas con diabetes se realizan un examen ocular de pupila dilatada, esencial para la detección de enfermedades diabética temprana en los ojos y es cuando es más tratable”, dijo el Dr. Paul Tamizado, director del Instituto Nacional del Ojo.
Sin síntomas de la enfermedad diabética del ojo es difícil detectarla a simple vista. Entre las complicaciones que genera esta condición incluye cataratas, glaucoma y retinopatía diabética y puede afectar a cualquier persona que tenga diabetes tipo 1 o tipo 2. Cuanto más tiempo una persona tiene diabetes, mayor es el riesgo de contraer la enfermedad diabética del ojo. Una vez que se pierde la visión es muy difícil volver a recuperarla.
Mantener la diabetes bajo control es clave para frenar la progresión de las complicaciones de la visión, como la retinopatía diabética. Hay pasos importantes que las personas con diabetes pueden tomar para mantener su salud y estas son:
- Tomar medicamentos según las indicaciones del médico.
- Alcanzar y mantener un peso saludable.
- Añadir la actividad física a tu rutina diaria.
- Controlar la presión arterial y los niveles de colesterol.
- Dejar el hábito de fumar.
Además, las personas con diabetes deben hacerse exámenes anuales completos de los ojos para ayudar a proteger su vista. La detección precoz, el tratamiento oportuno y la atención adecuada pueden reducir el riesgo de una persona sufra una pérdida grave de la visión y de la retinopatía diabética en un 95%.
“Hoy más que nunca, es importante que las personas con diabetes se realicen un examen completo de sus ojos en especial el de pupila dilatada al menos una vez al año”, menciona el Dr Suber Huang, presidente del subcomité de enfermedades diabéticas del ojo para el Programa de Educación para la Salud Nacional del Ojo. “ Se han desarrollado nuevos tratamientos que pueden funcionar mejor para los distintos pacientes. Lo que no ha cambiado es que el detectar tempranamente esta enfermedad es siempre la mejor opción”, concluye.
Si tienes diabetes, debes integrar como parte de tu rutina al menos una vez por año el visitar al oftalmólogo y realizar exámenes para descartar problemas mayores.
Fuente:xa0http://www.clevelandjewishnews.com/