La presbicia, que es la dificultad para observar de cerca, ocurre porque el cristalino pierde potencia, mientras que el músculo cicliar pierde elasticidad. Como resultado, el ojo disminuye su capacidad de acomodación, disminuyendo también la capacidad para ver de cerca.
En caso de presbicia, que están asociados a la edad y suelen darse al llegar a los 40 años, los anteojos se deben obtener con una adaptación individualizada por parte de un especialista.
Especialistas europeos recomiendan acudir a un oftalmólogo apenas aparezcan los primeros síntomas. Luego de los exámenes que correspondan, se recetará la corrección de acuerdo a las características propias de cada persona.
Entre los tratamientos para la presbicia están los tipos de lentes monofocales, bifocales, trifocales y progresivas, además de los lentes de contacto.
Los expertos resaltan que la presbicia va evolucionando, por lo que cada dos años aproximadamente es necesario acudir a una nueva revisión.
Ricardo Bittelman
Médico Oftalmólogo