La salud ocular «se resentirá en los próximos años en las sociedades occidentales» a causa del ‘síndrome de la pantalla‘, afección que se manifiesta por «el estrés o sobrecarga del sistema visual» que se produce al trabajar habitualmente con pantallas de visualización, como «ordenadores, teléfonos o videojuegos.
Así lo ha explicado, con motivo de la celebración reciente del Día Mundial de la Visión, el oftalmólogo de los Hospitales USP San Camilo y USP San José de Madrid, el doctor Nabil Ragai Kamel, que afirma que el resultado de la misma son las molestias oculares, como «el deslumbramiento, el picor ocular o el dolor de cabeza», indica.
Visita a un especialista
Ante ello, Ragai Kamel apuesta por acudir al oftalmólogo para conocer un diagnóstico profesional «y descartar otras patologías». De cualquier forma, da pistas sobre este síndrome, que suele aparecer en personas que están más de ocho horas delante del ordenador y que se manifiesta «mediante enrojecimiento de los ojos, lagrimeo y cansancio ocular«.
Así, señala como una de las causas de esta afección al parpadeo menos frecuente por el alto nivel de concentración ante el terminal informático, lo que puede producir también ‘ojo seco‘, visión borrosa o doble, fatiga visual, pesadez de párpados, fotofobia y queratitis e irritación de la superficie ocular«. Ya menos frecuente es la sintomatología correspondiente a «náuseas, mareos o vértigo», sostiene.
Recomendaciones médicas
Para evitar todas estas consecuencias del ‘síndrome de la pantalla‘, Ragai Kamel considera oportuno llevar una adecuada graduación de gafas o lentes correctoras y disponer en la sala de estancia de buena «ventilación, iluminación, temperatura y humedad». Además, señala como importante que el asiento sea «ergonómico» y que la mesa de trabajo esté situada «a una altura adecuada».
En cuanto al ordenador, el experto de USP Hospitales demanda que éste disponga de «filtros antirreflectantes y un buen contraste entre el fondo de la pantalla y las letras». No obstante, lo más relevante para evitar padecer esta afección es «cuidar la salud en general», ya que otros factores como el estrés o la menopausia influyen también.
Fuente: Europapress.es