Las imperfecciones ópticas de los globos oculares generan que las imágenes proyectadas en la retina tengan algún grado de emborronamiento, un problema que el sistema visual corrige de forma constante y permite que veamos las imágenes con nitidez.
El cerebro, a modo de compensar las diferencias visuales de ambos ojos, actúa como un “cíclope”. Así lo determinó un estudio internacional dirigido por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas de España, y publicado en la revista especializada “Current Biology”.
¿A qué se refiere con esto el trabajo de la entidad hispana? La investigación ha determinado que cuando cada ojo tiene un nivel distinto de emborronamiento, el cerebro usa como referencia de nitidez la imagen proyectada por el ojo con menor cantidad de imperfecciones.
Por otra parte, el estudio demostró que, pese a estas disparidades de emborronamiento, cuando se analizan los ojos por separado para determinar cuál es la imagen que se percibe más nítida entre un conjunto de imagen, el resultado es idéntico, independiente del que se use para llevar a cabo el test.
El origen de estas calibraciones oculares puede tener una relevancia clínica al momento de comprender las consecuencias que tienen las diferencias de errores refractivos en ambos ojos. Por ejemplo, un método para corregir la presbicia es la monovisión, donde se colocan distintas correcciones refractivas para ambos ojos. Un ojo – por lo general, el dominante- se corrige para la visión lejana, y el otro para la cercana.
Otro método de corrección definitivo para esta condición es la cirugía Lasik, la cual es una intervención segura, ambulatoria e indolora.
En el siguiente video podrás apreciar cómo actúa la presbicia en el ojo humano.