La alimentación sana no solo ayuda a nuestro cuerpo a estar en forma, sino que también influye en nuestra salud ocular, resultando vital el consumo de variados alimentos para la absorción de vitaminas.
Una esencial es la vitamina D, la cual se encuentra en alimentos como la leche, quesos, huevos, mantequillas y margarinas, además de algunos pescados. Pero muchas veces estas raciones no suelen lograr la cantidad necesaria para el organismo, por lo que la exposición a los rayos UV o los suplementos alimenticios benefician aún más el proceso de absorción de la sustancia.
Según un estudio realizado por investigadores del Lions Eye Institute en Perth, Australia, se demostró que las personas que presentaban dificultades para poder ver bien de lejos, tenían sus niveles séricos de vitamina D mucho más bajos que las personas que veían sin dificultad. Además, se reveló que las personas que tienen un déficit de dicha sustancia eran mucho más propensas a sufrir de miopía.
Por otra parte, se ha señalado que si la concentración de dicha vitamina en la sangre es alta, esta actúa como un escudo protector contra la miopía, pero de igual forma ocurre con la baja concentración. Por ello que aún se realizan estudios para descubrir los motivos.
En el 2013 se realizaron dos estudios independientes sobre oftalmología en el cual participaron niños de China y Dinamarca. Los resultados obtenidos en dicha ocasión fueron claros. Los estudiantes que pasaban más tiempo al aire libre y menos tiempos encerrados en salas de clases o en sus casas padecían menos casos de miopía que los que se mantenían encerrados en espacios cerrados.
A raíz de lo anterior, es que los expertos recomiendan la exposición a los rayos ultravioletas en tiempos cortos, pero frecuentes, ya que sería el sol el que ayuda a la estimulación de la producción de la vitamina D en nuestro organismo; esto además de consumir alimentos que la contengan para así mantener a nuestra visión mucho más sana.