Investigadores del Massachusetts Eye and Ear Infirmary y de la Universidad de Harvard crearon una aplicación que diagnostica el fondo del ojo con un iPhone e implementos que están disponibles en una práctica oftalmológica.
Los oftalmoscopios son un elemento de uso común para el diagnóstico de diversas condiciones visuales. No obstante, de la misma forma que los microscopios tradicionales, solo pueden ser utilizados por una persona a la vez y, para compartir la experiencia de lo que se está observando, solo puede realizarse verbalmente.
Ante esta situación, investigadores del Massachusetts Eye and Ear Infirmary y de la Universidad de Harvard , en Estados Unidos, desarrollaron el iExaminer. Esta aplicación del iPhone 4 se creó para el famoso oftalmoscopio Welch Allyn PanOptic, el que en conjunto con el dispositivo móvil, brinda la oportunidad de llevar a cabo exámenes de fondo de ojo y compartir imágenes y videos directamente desde el celular.
Esta aplicación también orienta a los usuarios mediante un examen completo de la visión, incorporando agudeza visual, motilidad ocular, pupilas, presión intraocular, campos visuales y la luz azul de cobalto para el examen externo.
Ventajas del iExaminer
Ya que el dispositivo se sostiene con ambas manos, la persona está a un brazo de distancia, pudiendo ver la pantalla del iPhone con ambos ojos. Esto permite una alineación más natural y cómoda, ya sea para el médico como para el usuario.
La unidad en su totalidad es bastante simple de transportar, pudiendo llevar la cámara al paciente al sitio que se requiera. Asimismo, es una herramienta valiosa al realizar consultas o cuando los usuarios están impedidos de movilizarse.
De forma inalámbrica, se pueden imprimir fotos desde cualquier lugar donde se cuente con una conexión a internet. El iExaminer capta video y fotografías de alta resolución paralelamente, lo que permiter al usuario escoger las mejores imágenes de la sesión.
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