Fácil de preparar, económico, nutritivo y un gran aliado para la salud visual, el huevo es una rica fuente de vitaminas A,D, E, B12, , B6, riboflavina y tiamina, minerales, y luteína y zeaxantina, que son fundamentales para prevenir problemas oculares. Por sus múltiples ventajas, en 1996 la Comisión Internacional del Huevo (International Egg Commission) estableció el 11 de octubre como el Día Mundial del Huevo.
Los huevos son una gran fuente de luteína y zeaxantina, unas sustancias que naturalmente le entregan color a las frutas y vegetales considerablemente coloreados y también a las yemas de los huevos. Además, ambos son fundamentales para el ojo humano, ya que investigaciones han determinado que la ingesta de alimentos que los contienen contribuyen a mantener una buena visión y a evitar su pérdida.
Si bien los vegetales de color oscuro, como la espinaca, poseen más de estos nutrientes en comparación a los huevos, la luteína y zeaxantina son más biodisponibles en los segundos. Esto quiere decir que el organismo los absorbe con más facilidad que en los vegetales o que en los suplementos dietéticos.
Prevención de la degeneración macular
Las degeneración macular asociada a la edad (DMAE) consiste en una patología visual que puede llegar a una total pérdida de la visión central, imposibilitando realizar actividades tan simples como leer o reconocer rostros. Al ser una enfermedad degenerativa de la visión, afecta generalmente a los adultos mayores.
Una investigación publicada en el American Journal of Clinical Nutrition demostró que el consumo de dos huevos al día son suficientes para incrementar los niveles de luteína y zeaxantina en la sangre. El doctor Nicolosi, de la Universidad de Massachusetts, en Estados Unidos, señala que el trabajo muestra una clara asociación entre el aumento del nivel de nutrientes y el riesgo de degeneración macular.
El experto exoplica que las yemas de huevo, al incrementar el nivel de biodisponibilidad de estas sustancias, se ha comprobado que disminuyen las probabilidades de esta afección degenerativa de la vista.
La investigación se realizó en un lapso de 5 meses, incorporando a 52 participantes con una edad promedio de 69 años.